Partido complicado el que tuvo que afrontar el domingo pasado el Osaka.
De primeras el equipo se presentó a la pista muy mermado de efectivos, algunas lesiones y ausencias se sumaron a bajas inesperadas en el último momentos. Solo 4 jugadores de campo más el portero suponían un handicap, nos jugábamos 3 puntos importantes contra un rival directo en la clasificación.
Ellos se presentaban con bastantes efectivos por lo que iba a ser una épica afrontar y competir en condiciones en este partido.
El inicio con las fuerzas intactas los dos equipos emplearon mucha intensidad en su acciones.
Ellos abrieron el marcador en ese intercambio de golpes pero los osakeños no le perdieron la cara al partido.
En un par de buenas ocasiones Javi y Darío le dieron la vuelta a la tortilla.
Ellos buscaban romper el equilibrio osakeño y revolucionar el partido sabiendo que el Osaka no tenía relevos desde el banquillo, pero el cuarteto de la cancha supo regular sin bajar la guardia.
Y eso que durante el partido se añadieron un par de problemas físicos por parte de Gerardo y de Sergio que mermaron más si cabe al equipo.
Antes del descanso llegó el empate a 2.
En la reanudación de la segunda parte atacábamos "cuesta abajo" (jiji).
EL equipo sacó fuerzas de flaqueza para salir a la contra en un par de ocasiones, en una de ellas Darío consiguió otro gol, todavía quedaba bastante partido.
Parecía todo controlado pero ellos no eludían el choque y la fuerza desmedida contra los osakistas que empezaban a notar el desgaste de jugar sin cambios.
y claro, llegó la remontada de ellos, ayudados por un penalti inexistente y otra jugada mal defendida por el Osaka pusieron el 4-3 en contra ya quedando muy poco tiempo.
Ellos no supieron controlar las faltas y cometieron la sexta con el tiempo cumplido el arbitro dijo que se lanzaba y se acababa, Javi con frialdad anotó de tiro seco a media altura.
Un empate de recompensa a un montón de inconvenientes. Seguimos mirando al frente.
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