Tercera jornada de liga, el rival en esta ocasión era nuevo, al menos con el nombre "Los sedientos" no figura en la liga en los últimos años.
El equipo rival estaba formado por jugadores muy jóvenes, por lo que se presumía que serían rápidos.
En los primeros minutos de tanteo se vio que el partido iba a ser muy competido, ellos sin un juego clásico de fútbol sala sin rotaciones ni movimientos de equipo, basaban sus ataques en la técnica individual y el desborde en regate de alguno de sus jugadores.
El Osaka buscaba el juego combinativo con rotaciones y movimientos de sus jugadores sin balón, de esta forma conseguía llegarse a la portería rival y generar ocasiones.
Pero como viene pasando en los últimos tiempos, somos muy blandos defensivamente y se demuestra en que a los contarios les cuesta muy poco hacernos gol, damos muchas facilidades.
Así que enseguida en ataques verticales y veloces los rivales encontraron 2 goles, aunque Gerardo en una incursión por la izquierda cruzó un tiro a media altura que acortó distancias en el marcador.
Pero los osakistas estaban algo espesos, no tenían un juego fluido, demasiados minutos sin balón sobre todo falta de acierto de cara al gol, en esta primera mitad hubo al menos 4 o 5 ocasiones muy claras mano a mano con el portero y se marraron de forma estrepitosa.
Así se llegó al descanso.
Está claro que todo va unido, si no estás acertado de cara al gol y encima en defensa eres blando pues se traduce en partido sufrido y derrota casi segura.
Y eso fue lo que ocurrió en la segunda mitad.
Una de las opciones pasaban por marcar pronto para acercarnos al marcador y tener opciones.
Y el equipo salió con ganas, empezó a crear ocasiones y se seguían fallando pero tanto fue el cántaro a la fuente que se consiguió. Fue Alfredo en un tiro dentro del área con el portero muy encima, probablemente la oportunidad menos clara.
Parecía un punto de inflexión a favor pero la realidad es que se convirtió en contra.
A partir de aquí todo fueron despropósitos y todo salió mal, malas acciones y malas decisiones, individuales y colectivas. Así que nos fueron cayendo hasta cuatro goles más y tiramos el partido y aunque el equipo entregó todo lo que tenía sobre todo voluntad física y mental, solo nos dio para meter un gol más y maquillar algo el resultado final 7-3👎
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