Mañana típica de enero fria y despejada. Había que calentar bien para evitar las típicas lesiones musculares por el frio.
El juego comenzó con posesión osakeña, el equipo contrario dudaba en defensa, sus jugadores no se ponían de acuerdo unos presionaban arriba y otros quería cerrarse atrás. Esas dudas las leyó el Osaka rapidamente encontrando los espacios entre líneas y generando mucho peligro.
Los acercamientos osakistas eran claros pero hubo que esperar a que funcionara la estrategia de falta para abrir el marcador.
La tónica sería la misma el resto del partido muchas ocasiones y poco acierto, el portero rival fue el mejor de su equipo con intervenciones de mérito.
Con el resultado tan ajustado cualquier jugada podía cambiar el signo del partido, urgía anotar el segundo gol que se hizo de rogar, tuvo que ser Javi cerca del descanso con tiro raso y cruzado.
En la segunda mitad los osakistas alternaron fases de buen juego y movimiento de balon con otras fajandose en defensa y cediendo la iniciativa, era importante no encajar gol para que el rival no se viniera arriba.
Fue entonces cuando surgió la jugada polémica del partido, falta indirecta que el jugador rival chutó directamente a portería y que el árbitro sorprendentemente dió como gol argumentando que rozó en Sergio, asombro y controversia porque no tocó en nadie.
El partido subió de tensión en los minutos finales hasta que una galopada de Raúl hasta la línea de fondo con tiro sutil cruzado el balón besó las mallas y sentenció un partido más que trabajado.
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