Y llegó el día de volver a pisar la cancha de juego.
Sin saber muy bien como nos íbamos a encontrar después de 9 meses de total inactividad futbolística, sin saber muy bien hasta donde llegaríamos.
Pues fue más duro de lo esperado sin que sirva de escusa se nos juntaron todos los factores en contra.
Una pista de juego remodelada con una superficie distinta a la hora de moverse, con una velocidad de juego a la que hay que acostumbrarse.
Aunque sabíamos que había que jugar protegidos con mascarilla hasta que no lo haces no te imaginas las sensaciones distintas y como afecta.
Una inactividad que pasó factura, con falta de ritmo, de toque, de velocidad...falta de todo.
Y un rival complicado mucho más rodado, acostumbrado desde hace un tiempo a este nuevo deporte post pandemia.
En definitiva fue bastante penoso con las ganas que teníamos nos dieron un baño tremendo.
Derrota 13-2
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