La crónica: "Control suficiente para ganar"

El domingo pasado aunque no había jornada tuvimos que afrontar el partido aplazado por petición del equipo contrario.
En un polideportivo casi desierto el partido comenzó con el siguiente quinteto inicial: Sergio en portería, con Pedro de cierre, Ricki y Santi de alas y Javi arriba de pivote.
En el banquillo quedaban José Mari y Félix.
El comienzo era buscar el equilibrio entre defensa y ataque, no perder el sitio en la pista, sin descuidar la retaguardia y con la posesión de balón, no perder balones que pudieran generar contras del rival.
Enseguida los osakistas vieron como generar juego y ocasiones, ellos se descolocaban con facilidad en cuanto se buscaba el lado contrario o el segundo palo cerca de portería.
No hacía falta hacer unas rotaciones largas, era mejor buscar movimientos en cortos apoyando al compañero que tenía la pelota.
En una buena combinación del cuarteto casi al toque y de lado a lado, Ricki abrió el marcador a los pocos minutos de empezar.
No tardo en llegar el segundo gol en un buen balón al interior del área que el portero rival rechazó, Ricki recogió el balón y asistió a Santi que solo tuvo que empujar a la red
Se estaban consiguiendo jugadas y acabándolas para evitar de esta forma que el contrario estuviera cerca de la portería de Sergio.
En cualquier caso ellos tenían que reaccionar, buscaban mucho a su jugador con el número 10 que tenía bastante cuerpo y buen disparo, había que intentar estar encima de él sobre todo para que no tuviera sitio para armar su tiro, aún así tuvo alguna ocasión si no recuerdo mal un par de tiros a los postes.
Pero cuando el Osaka era capaz de mover la pelota con criterio e inteligencia ellos sufrían mucho, en una buena combinación con desmarque de Santi hacía el área rival ganando la espalda, José Mari (que ya había saltado al campo en lugar de Javi) puso un buen balón que Santi sin parar remató a gol con suavidad.
Con 3-0 parecía aclarado el panorama pero nunca hay que confiarse, las rotaciones siguieron Santi dejó el sitio a Javi y así se llegó hasta el descanso, repito parecía claro pero no se puede uno relajar.
En la segunda mitad Ricki dejó el puesto a Félix.
En el inicio era importante salir metidos e intensos, pero eso lo hicieron ellos, cada vez apretaban más al balón, los osakistas cada vez más incomodos no salían ni encontraban las combinaciones de la primera mitad, encima en dos errores seguidos atrás en la salida en minuto y medio anotaron sendos goles que apretaban el resultado y que al rival le daban alas.
En estos minutos de incertidumbre el partido podía decantarse para un lado o para el otro, Pedro dejó el sitio a Ricki, el quinteto osakista mostró debilidades.
Menos mal que surgió un instante de experiencia y saber estar, cuando Félix en una falta desde la posición de cierre en propio campo, miró de reojo al portero rival al que vio adelantado y le lanzó un "misil inteligente" bombeado que entró en la portería rival y que fue como un bálsamo para el conjunto osakista, golazo!.
Los rivales cabreados ya quemaban sus naves, pero ese gol les había hecho daño, Félix tras un encontronazo dejó el puesto a Pedro y pocos minutos después Santi entró por Javi, ya para ese momento el equipo encontraba espacios y con combinaciones sencillas de tocar rápido y moverse para poder recibir se congelaba el ritmo y se hacía correr mucho al contrario.
En otra buena combinación José puso a Santi un balón en diagonal al borde del área y este sin parar cruzó un pase a Ricki que entraba solo por el segundo palo y por bajo batió al portero para dejar el 5-2 en el marcador
De ahí al final juego de paredes para llegar al pitido del árbitro.