El partido se presentaba para el Osaka sabiendo que en otras temporadas el rival le había puesto en problemas hasta el punto de quitarle puntos, siempre un equipo veterano, aguerrido y hasta con cierta mala uva.
Pero lejos de estas premisas, el partido fue coser y cantar, tal vez por el pedazo de plantel que presentó el Osaka y tal vez también porque los osakeños abrieron rápido el marcador.
El caso es que el partido transcurrió por cauces deseables para el equipo arlequinado, control del balon y del juego con un rival que perdía fuerza con el paso de los minutos y así fueron cayendo los goles.
La segunda mitad de lo tranquila que discurría pareció hasta algo insulsa, el equipo se contagió hasta del ritmo rival que era un poco de "trote cochinero" y es que el contrario estaba desconocido, para colmo un percance grave ocurrido en la pista de al lado terminó por descentrar a todos y el árbitro pitó el final con algún minuto de antelación. Resultado victoria por 5-1.
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