La crónica: "Flojeando"

Efectivamente flojo partido el que jugó el Osaka el domingo pasado y que nos costó la quinta derrota de la temporada.
Las bajas y las ausencias pasaron factura tenía que ocurrir tarde o temprano despues de ir sacando las victorias apuradamente en las últimas jornadas.
En cualquier caso hubo fases en las que no se jugó tan mal sino tal vez faltó intensidad y regularidad, demasiados altibajos durante el partido.
El inicio fue prometedor, los osakistas salieron con ganas con un quinteto bastante ofensivo y sorprendieron al rival que cometió algunos fallos en la salida, en uno de ellos Javi aprovechó un regalo para inagurar el marcador, no se tardó mucho en aumentar la renta en una buena jugada que de nuevo Javi anotó por bajo.
El Osaka tenía cierto dominio y atacaba por ambos flancos dando amplitud al juego, pero se empezó a vislumbrar un juego muy abierto, casi un correcalles y eso empezó a ser lo que cambió el rumbo del partido.
El Osaka cayó en la trampa de jugar un partido demasiado abierto, no cerrando bien en defensa dejando espacios para el juego directo del equipo contrario con muchos balones a sus delanteros a la espalda de nuestros defensores, y por ahí se empezó a resquebrajarse el equipo.
Ellos con muy poco desgaste generaban ocasión, peligro y gol.
El Osaka seguía atacando pero con la pólvora mojada, el rival anotó el empate y muy cerca del descanso culminaron la remontada, probablemente una de las claves para el desenlace.
No se había jugado mal, pero no se supo conservar la ventaja conseguida al principio.
En el descanso saltaron chispas entre los componentes del equipo por discrepancia en aspectos del juego, pero en el fondo por un motivo común: "el amor a los colores levanta pasiones".
La segunda mitad fue un quiero y no puedo, el equipo se volcaba cada vez más en ataque y por consiguiente desguarnecía más la defensa.
Esporchu consiguió el 4-2.
Después de varias ocasiones y acercamientos que no fructificaron Alfredo anotó un tercer gol que daba algo de esperanza, pero fue un espejismo.
Lo que no cambió en esta segunda mitad fue la efectividad mostrada por el rival, practicamente cada acercamiento se plasmaba en el marcador.
Se optó por jugar con portero jugador, se movió la pelota bien a un lado y a otro e incluso entre líneas pero cuando no se está acertado de cara a gol es muy complicado, al final tal vez demasiada distancia en el marcador para los méritos de los dos equipos pero así es este deporte, derrota por 6-3.