La crónica: "EMPATE INESPERADO"

TROPICANA 3
C.D.OSAKA    3 Titulares: Sergio, Pedro, José Mari, Raúl y Javi. También jugaron: Santi y Nacho. Félix estuvo apoyando en todo.
Goles: 1-0. José Mari min.10; 2-0 Santi min.12 y 3-1 Raúl min.30.

 El partido pilló frio al Osaka en todos los aspectos, en el clima, en la forma física, en el juego, en el rival y en el desenlace final.
Como en una pelicula de Hitchcock según avanzaba el partido más incertidumbre generaba.
Pero vayamos por partes, el inicio fue lo esperado el Osaka proponiendo su juego ofensivo con control del balón y del ritmo, el rival al que ya conocíamos de otras temporadas con su propuesta de constante protesta y malas formas hacia el árbitro, hacia el contrario y hacia el mundo entero.
El Osaka con la fuerzas intactas generaba ocasiones aunque con poca efectividad de cara al marcador, aún así aprovechó las menos claras para adelantarse en un 2-0.
Pero en la última fase del primer tiempo y ya con las fuerzas más igualadas el partido entró en un ritmo demasiado suave para el Osaka sobre todo en defensa, de esta forma el rival con más ganas que otra cosa consiguió marcar en un momento psicológico antes del descanso.
En la pausa se habló de apoyos, de presión y de sacar el balón jugado, empezó la segunda parte y el partido entró en un juego sin de control por parte de los dos equipos, eso beneficiaba claramente al contrario, que además en su afán de remontar presionaba mal dejando a los jugadores osakeños en situaciones de dos para dos que aún siendo claras no supieron resolver.
Mediada la segunda parte en la ocasión menos brillante Raúl marcaba el 3-1, pero quedaba mucho. A partir de ahí el conjunto osakeño pilló una pájara de las buenas, como las de Perico Delgado en su época. Y el contrario a golpe de protesta y de desgate, primero acortó y luego empató faltando a penas 2 minutos para el final. Que gritos! parecía que habían ganado el campeonato.
La crispación y la tensión generada por el rival hizo saltar por los aires los nervios de algunos jugadores, la tangana solo sirvió para enfriar el juego y que el reloj corriera hasta el pitido final.
Tal fue desbarajuste del final del partido que el árbitro en sus anotaciones y entre gritos, tarjetas y empujones hasta dudo del resultado que se había producido. Les daba como ganadores a ellos!!!!
Menos mal que rectificó a tiempo.